El Significado de las velas en Navidad. Flores de Pascua, velas, coronas, guirnaldas o luces de colores son algunos de los adornos que en estas fechas envuelven nuestro hogar en un clima entrañable y festivo. La iluminación también debe formar parte de la decoración navideña. Su aspecto simbólico en estas fechas es muy importante. En su significado cristiano el nacimiento de Jesucristo es el suceso que iluminó el mundo hasta entonces sumido en las tinieblas. Las bolas de colores o la estrella del árbol son símbolos de la importancia de la iluminación en estas fechas.
No sólo los hogares cristianos se decoran e iluminan en estas fechas. En otras culturas las calles, casas y negocios también se engalanan para despedir el año y dar la bienvenida al nuevo. En todas ellas la luz tiene un papel protagonista. Por ejemplo, en China, se fabrican, en las fiestas de fin de año, lámparas de papel con velas en su interior. Es una forma de honrar a los antepasados y alejar a los malos espíritus. Así el año empezará con buena fortuna.
La Navidad es una fiesta iluminada. Y la más cálida e íntima iluminación es la que proviene de las velas. Con ellas se resguardan los altares, se conceden deseos y se da calidez a los hogares. Además de ser una fuente de calor y energía las velas proporcionan paz, tranquilidad y propician la intimidad y el calor familiar.
Las velas en Navidad han estado presentes desde el principio del cristianismo. Cuando la Virgen María dio a luz a Jesucristo en un pesebre bajo la luz de una vela. En épocas pasadas, el árbol de Navidad se adornaba con cirios y velas. Estas representaban la luz y el amor cálido de Dios. Además, se utilizaban para representar y recordar las almas de los antepasados y familiares fallecidos.
Las velas de la corona de Adviento
Justo un mes antes de Navidad se colocan en los hogares la corona de Adviento. Esta corona está compuesta por un círculo hecho con ramas de pino o abeto. Dentro de la corona o entre las ramas de ésta se colocan cuatro velas, que forman entre sí un cuadrado. Es muy habitual situar una quinta vela en el centro de la corona. A esta estructura se añaden otros adornos como piñas o las bolitas del acebo, lazos…
Las cuatro primeras velas representan cada uno de los domingos del tiempo de Adviento y la quinta vela representa el día del Nacimiento de Cristo. Todas ellas son el símbolo del agradecimiento por la venida de Cristo. Que es justo lo que significa la palabra Adviento.
Significado de las velas en Navidad
Por motivos de seguridad y por los avances de la tecnología, las velas en Navidad del árbol sustituyeron por luces eléctricas. Aún así, las velas siguen formando parte de la decoración navideña.
La tradición de las velas en Navidad se inició para conmemorar el nacimiento de Cristo. Y se usaban sobre todo velas alargadas y blancas. Pero hoy en día, puedes encontrarlas de diversas formas. Las clásicas velas alargadas o cilíndricas, las de formas geométricas y las que representan elementos navideños como piñas, figuras de Papá Noel, renos… También los colores son muy variados.
Las más populares son de color verde, las rojas, blancas, plateadas, y doradas. Todos estos colores tienen un significado especial por lo que a la hora de decorar tu casa con velas en Navidad debes escoger el color más apropiado.
Las velas blancas atraen la paz, además de ser elegantes y muy luminosas. Se asocian a la claridad de espíritu y a la energía positiva. Simbolizan la calma y la sencillez porque están asociadas a lo espiritual. Su luz es el nexo entre lo humano y lo divino. Préndelas al inicio de tus cenas familiares de Navidad como símbolo del inicio de un momento de amor e intimidad. Tus celebraciones se verán inundadas de energía positiva y atraerás la armonía familiar. Puedes colocarlas en cualquier parte pero cerca del pesebre o del árbol atraerán la prosperidad.
Velas de otros colores
Las velas en Navidad de color dorado o amarillo se encienden para atraer la abundancia y la prosperidad. La escasez se difumina bajo las velas doradas y tus asuntos económicos se verán bien auspiciados. Mézclalas con velas rojas para darles más energía y pasión.
Por su parte, las velas verdes atraen la esperanza y propician la buena salud. Mézclalas con velas blancas para simbolizar la vida en invierno y el renacer de la buena ventura. Las velas rojas atraen el amor, tanto el de pareja como el amor de amigos y familiares. Son símbolo de la pasión y de la energía. Las azules atraen la paz y la conciliación. Las naranjas, el éxito y el ingenio.
Qué velas usar en cada ocasión
En cada una de las fiestas de Navidad debe colocarse velas de un color concreto. Así, en Nochebuena las velas que enciendas deben ser rojas como la flor de Pascua o flor de Nochebuena. Además de una atmósfera cálida las velas rojas te darán energía para aguantar hasta la medianoche y la misa del gallo. Colócalas en el centro de la mesa donde vayáis a cenar o muy cerca.
El color de las velas en Navidad puede ser rojo, verde, blanco y dorado. El rojo es energía, el verde prosperidad, el blanco paz y el dorado abundancia. Son colores que casan perfectamente con este día y que combinan muy bien entre ellos.
Las velas de Nochevieja tienen mucha simbología. Esa noche se produce el cambio de año y es momento de formular los deseos para el año nuevo. Los deseos de cada persona son muy diferentes, por eso los colores de las velas los tienes que elegir tú. Eso sí debes dejarlas encendidas en el cambio de año para que quemen lo malo y empieces el nuevo año con solo lo bueno.
En Año Nuevo todo vuelve a comenzar. La vida te ha dado un nuevo año en blanco para que lo llenes de deseos, objetivos y vivencias. Lo ideal es poner velas de colores variados, pero sobre todo, doradas para atraer la prosperidad, verdes para atraer la salud y rojas para que el amor te sonría.
Recuerda siempre encender tus velas con cerillas de madera, nunca con encendedor o cerillas de cera. Tampoco las apagues soplando, mejor con un soplavelas. Si no tienes puedes usar una cucharilla de café.
Ten mucho cuidado con el lugar donde colocas las velas en Navidad. Son días de mucho ajetreo y visitas por lo que debes ponerlas en lugares de difícil acceso para que no se produzca un accidente. Y sobre todo, mantenlas lejos del alcance de los niños. Las velas no son un juguete y los pequeños podrían herirse.